Santiago de Puriscal
Patrimonio en Ruinas
*Templo antiguo, con historia propia.Era las 2 y 13am cuando vi mi reloj, era hora de narrar mi viaje a una hermosa y viejita estructura, ubicada en mi bello y tranquilo pueblo, Puriscal, cantón numero 4 de la provincia de San José, aproximadamente a unos 40 kilómetros al suroeste de la capital para serle más especifico, su nombre se debe al “purisco” o flor del frijol, un cultivo que junto al maíz abundan en nuestras tierras.
Allí mismo podemos encontrar a mi dama, la Iglesia de Santiago Apóstol, se puede decir que es considerada una madre para muchos de los puriscaleños.
Nació entre los años 1936 y 1965, con la colaboración de muchos de nuestros abuelos, en mi viaje en el tiempo pude conversar con algunos ancestros y escuche algunas historias acerca de mi dama la que en mi actualidad está abandonada.
Caminando por un hermoso jardín, lleno de flores y un cielo único, sin saber donde me encontraba, vi una estructura con forma de cruz, de cuerpo alargado media unos 50 metros y el perpendicular 28, no podía admirar tanta belleza y debía investigar su interior, en el poseía tres naves de esbelta proporción y considerable altura, iluminada por sus hermosos ventanales laterales.
Recorriendo su gran interior encontré con una señora, bien vestida frente a aquel altar de mármol, yo aun sorprendido y confuso le pregunte que era esa hermoso estructura, sin voltearse ella solo respondió “Era una hermosa mañana del mes de diciembre, cuando tuve la dicha de conocer tan bello templo, aún tenía el piso en obra gris, pero me impresionó mucho, tanta majestuosidad, era una verdadera joya” me dijo mientras se alejaba.
Continuando mi viaje esta vez unos cuantos años más a la actualidad, llegue a un lugar similar con sus paredes altas y de ladrillo que fueron capases de soportar varios daños por la naturaleza entre ellos temblores y arboles en su interior, ya no era la misma dama que irradiaba belleza, lamentablemente esta hermosa estructura había crecido sobre una falla sísmica, esto me lleno de un gran sentimiento de tristeza porque no solo su hundimiento y deterioro desde hace años, sino que ha llevado a la clausura dejándola inhabilitada desde entonces.
Decidí continuar con mi viaje teniendo la esperanza que aquellos hombres que la admiraban, habrían defendido esta sola e hermosa dama, unos 4 años hacia la actualidad me encontré con una viejita solitaria e deteriorada, pero un no perdía su encanto a pesar de las grietas que le había reparado el destino, me entere que los sacerdotes optaron por demoler la estructura, manteniendo la esperanza de ver a esta hermosa viejita viva, llevando historia y recuerdos a todos los puriscaleños un grupo de vecinos, los cuales crearon una asociación para ayudar a rescatar la belleza que nuestros abuelos nos había heredado.
Recuerdo que en esa tarde antes de partir, la hermosa viejita se encontraba en espera de su resultado para pasar a ser patrimonio nacional.
Regresando de mi viaje, emocionado de que la viejita que en algún momento dio el bautizo y matrimonio a mis padres iba a seguir en pie, mostrándonos su gran sabiduría, al llegar en una noche oscura y fría llame a Miguel Cruz el es un ingeniero con gran trayectoria, y sabia que le tenía gran aprecio a mi hermosa viejita, Cruz era otro defensor de la poca estructura pero valiosa obra arquitectónica que se encuentra en Puriscal. “No está en condiciones de escombros; está severamente dañada, pero sabremos cómo preservarla”, dijo Miguel con una voz de esperanza.
Entre sus cálculos para los arreglos de esa joya andan aproximados a los ¢400 millones.
Un monto razonable, bastante bajo para las personas de la capital que eran adineradas, pero para nosotros lo agricultores elevado.
Yo nunca pierdo la esperanza de volver a ver esta viejita convertida en aquella dama, hermosa estructura que tuve la dicha de conocer en mi viaje, en lo más profundo de mí, siento que al demoler la viejita que da historia a esta crónica estamos perdiendo un pedazo de Puriscal, un pedazo de nosotros y de nuestra identidad, ojala la municipalidad pueda restaurarla y ayudar a esta hermosa dama, nuestra madre.